De todas las versiones que repiten éxitos de antaño que se están creando últimamente, ha surgido un proyecto que llama la atención. En 2015 Robert Eggers debutó con la excepcional La bruja (The Witch), una visión personal y oscura del mito de las novias del Diablo.
El director consiguió que todos estemos alerta ante su próximo paso adelante, y parece que ya tiene un nuevo film en marcha: Nosferatu. ¿Necesario? Tal vez competir con lo que ya hicieron F.W. Murnau entre silencios y Werner Herzog con la espeluznante presencia de Klaus Kinski sea una locura, pero si hay libertad, puede salir algo grande.
Esta adaptación libre del Dracula de Bram Stoker, sigue los pasos del Conde Orlok de Transilvania, que contrata a Hutter como agente para comprar una casa en Alemania y acaba enamorado de la esposa del mismo, Ellen.
Aunque este proyecto, producido por Studio 8 está todavía en sus inicios, Eggers cuenta de nuevo con la protagonista de La bruja, Anya Taylor-Joy.
Porque una nueva película de vampiros nunca sobra.
Vía | Variety
