Después de su debut, Ordinary People, y de rodar uno de los episodios de Les ponts de Sarajevo, Vladimir Perišić, que ya sabe qué es ser reconocido —no en vano, su primer trabajo obtuvo el Corazón de Sarajevo y el FIPRESCI en ese mismo festival—, recibiría en Cannes el Premio Fondation Louis Roederer para su actor central, un Jovan Ginic que debutaba para la ocasión en esta Lost Country, que además obtuvo una buena recepción en Cannes.
Jasna Đuričić (protagonista de films como Quo Vadis, Aida? o la más reciente Working Class Heroes) y Boris Isaković (que precisamente acompañaba a Đuričić en los films mentados, además de haber destacado en otros como Father o The Dawn) acompañan al joven debutante en esta cinta que nos sitúa en Belgrado, durante 1996, en plena manifestación estudiantil contra el régimen de Slobodan Milošević. Stefan, de 14 años, lidera solo en el fragor de los acontecimientos la más dura e ingrata de las revoluciones: aceptar lo inaceptable, es decir, que su madre esté entre los cómplices de esas políticas inhumanas, y encontrar la fuerza para afrontarlo.
Lost Country llegará el 11 de octubre a cines galos.
Trailer de Lost Country
Póster de Lost Country