Ambientada con gran acierto en el año 1959, Populaire es una comedia romántica con todos los ingredientes de las ‹screwball comedies› del Hollywood de los años 30 y 40. De hecho, es una película que bien podría haber sido dirigida por Lubitsch, Leisen o Sturges, y protagonizada por Carole Lombard o Claudette Colbert y Clark Gable o William Powell.
Tenemos a una típica chica de provincias, guapa pero algo torpe, que trabaja en la tienda de su padre y cuya máxima aspiración es llegar a trabajar en una oficina como secretaria. En la época en la que sucede la película, ser secretaria era el trabajo soñado por las muchachas que, al tiempo que empezaban a incorporarse al mundo laboral, suponía una oportunidad de “cazar” un marido, véase su propio jefe.
Rose, nuestra chica, consigue que Louis, un agente de seguros soltero y muy seguro de sí mismo, la contrate al ver su habilidad con la máquina de escribir. Louis tiene además la intención de inscribir a Rose en el concurso de mecanografía y para ello se ocupa de su entrenamiento.
A partir de aquí se suceden todos los elementos típicos de la ‹screwball› clásica: la inicial animadversión entre la pareja, sus desacuerdos que poco a poco van acercando sus posturas, la familia/amigos que dan el “empujón” para que los protagonistas se vean mutuamente con otros ojos, y los malentendidos que crean el conflicto necesario en toda comedia romántica. Todo ello aderezado con mucho humor, un ritmo que no decae ni en la historia ni en los diálogos, y un tono tierno y clásico que poco tiene que ver con las comedias que se hacen actualmente.
La pareja protagonista está interpretada por la encantadora Déborah François, que recuerda el candor de Audrey Hepburn, y por Romain Duris, a quien pudimos ver en Las muñecas rusas y en Los seductores entre otras, y entre ellos hay una química que traspasa la pantalla desde su primera escena juntos.
A ellos se les unen el canadiense Shaun Benson y Bérénice Bejo, la inolvidable Peppy Miller de The Artist, que dan vida a los amigos de la pareja que juegan un papel fundamental en el desarrollo de su relación.
Dirigida por el debutante Régis Roinsard, Populaire sigue la estela de las comedias románticas francesas de los últimos años, con un aire retro y colorido que recuerda a Amélie, y con inspiración en el Hollywood clásico como hiciera la exitosa The Artist. Precisamente, los derechos de esta última para su distribución en Estados Unidos, fueron adquiridos por The Weinstein Company, los mismos que han comprado los derechos de Populaire con la intención de conseguir unos resultados parecidos a los que en su día tuvo The Artist.