Tras ganar en el pasado festival de Rotterdam con My Dog Killer, que sigue su camino por diversos festivales, la realizadora eslovaca Mira Fornay ya busca financiación para su próxima película, donde el drama absurdo sobre la violencia doméstica Cook, F**k, Kill (Frogs with no Tongues), donde se intenta tratar un tema serio con un aspecto poco convencional.
Según desvela su sinopsis «se retrata un día en la vida de Jaroslav K, un maltratador que trabaja como enfermero. Un hombre guapo, casado y en apariencia bien intencionado que en realidad está obsesionado con el sexo y la cocina. Sufre celos patológicos de su esposa, Blanka, a la que tiene aterrorizada en su gran casa situada en una pequeña localidad. No duda en usar la violencia, la mentira y el miedo hacia los demás y termina por causar una tragedia familiar que se vuelve contra él.»
Mira Fornay (arriba en el rodaje de su ópera prima Foxes) espera encontrar nuevos apoyos para comenzar el rodaje en verano de 2015, mientras sigue disfrutando de las alabanzas de My Dog Killer.
Vía | Cineuropa