Quizá a Mika Kaurismäki le haya tocado vivir un poco a la sombra de su hermano y, no obstante, nos encontramos ante un cineasta de lo más interesante que mediante títulos como Helsinki-Nápoles, todo en una noche [reseña] o Zombie y el tren fantasma ha logrado desarrollar una carrera paralela que, de vez en cuando, deja estimulantes piezas. Es por ello que no está de más seguir sus pasos, y ahora nos encontramos con Master Cheng ante un nuevo largometraje del finlandés, apenas unos años después de la llegada de su Reina Cristina.
En ella, el cineasta, que vuelve a copar tareas de producción y escritura, nos pondrá tras Cheng, un chino de 45 años dueño de un restaurante que ha viajado junto a su hijo alrededor de medio mundo hasta llegar a una remota aldea de Finlandia. Tras la reciente muerte de su mujer en un accidente, Cheng querrá romper con todo viajando con su hijo para ver a un viejo amigo finlandés que vive en una granja en la campiña finesa. En un lugar dejado de la mano de Dios, Cheng puede imaginar bosques sin fin, miles de lagos y un país cuya población es de una quinta parte que la de su ciudad de residencia, Shanghai.
Todavía en fase de financiación, y habiendo recibido recientemente una nueva ayuda, veremos si pronto podemos tener de vuelta a Kaurismäki con un proyecto que parece, cuanto menos, prometedor.
Info | The Finnish Film Foundation
Redacción: Rubén Collazos