Al mismo tiempo que Thea (Paprika Steen) interpreta en el teatro el papel de Martha en un montaje de la obra ¿Quién teme a Virginia Woolf? de Edward Albee, se encuentra con las dificultades para recuperar la relación con sus hijos. Unos hijos ahora distanciados, que viven con su padre y su nueva pareja después de su divorcio. Los problemas con el alcohol —pero también su personalidad— la hacen una mujer difícil de tratar, inestable, incapaz de asumir que hay cosas que escapan a su control, que no dependen únicamente de cómo actúe en cada instante. En Applause (2009) el director Martin Zandvliet intercala planos de sus interpretaciones sobre el escenario con sus continuas recaídas en la bebida y el trato hacia su asistente, su exmarido, sus hijos… construyendo un diálogo intertextual entre ambos relatos. La cámara en mano apenas aparta la mirada del rostro de Steen, con planos cerrados sobre la actriz incluso en sus actuaciones, obviando los demás elementos a su alrededor o incluso el público, al que se le puede escuchar riendo puntualmente ante determinadas frases. El estudio del personaje y la perspectiva psicológica de la narración son la base de una película que pretende capturar, de forma próxima en sus imágenes a la autenticidad documental, también la descomposición de un matrimonio.
Ideas que la conectan en ciertos aspectos con las intenciones y recursos narrativos de Función de noche (Josefina Molina, 1981). Pero si en la cinta de Josefina Molina lo que se veía era la honestidad de una pareja ya separada sobre sus sentimientos y acciones del pasado, Zandvliet maneja —desde la ficción más convencional— otros registros más oscuros de la naturaleza humana y los proyecta sobre la maternidad, el paso del tiempo y cómo afectan a una mujer que no encaja en el papel de madre y no cumple las expectativas que este genera en la sociedad. La interpretación de la protagonista, con su extraordinaria expresión física y gestual, propone al espectador la observación cercana sobre un personaje que no resulta precisamente amable, pero cuya soledad y vulnerabilidad latente nos interpelan constantemente a seguir profundizando en sus deseos frustrados. El tiempo ha pasado y la edad hace mella en su aspecto dejando un registro imborrable de quién es. Si en el teatro todo es presente, la vida es un reflejo de una sucesión de acciones y decisiones tomadas a lo largo de los años. Las consecuencias de los actos del pasado determinan radicalmente la situación de cada uno de nosotros en el ahora. Algo que para Thea parece imposible de reconciliar. Sus mentiras y manipulaciones componen un retrato crudo de alguien que se niega la realidad a sí misma, habituada a ser la mitificación idealizada de una estrella extraordinaria y única para sus admiradores.
La fotografía de algunas escenas del filme cuenta con una intensa luz que llega a quemar la textura tan característica de la imagen rodada en 16 mm. Los encuentros con sus hijos —a los que pretende recuperar— significan para ella la vida en toda la amplia gama de posibilidades que no puede alcanzar, que se despliega ante sus ojos y sus sentidos de manera efímera pero deslumbrante. Pero ese camino que pretende retomar, al mismo tiempo, resulta demasiado para ella. La luminosidad excesiva supone un contraste directo con sus noches en vela incapaz de superar su adicción o pasando el tiempo sola en un bar, donde los ecos de un pasado nebuloso de copas, encuentros sexuales y violencia contra sus hijos todavía es demasiado reciente. Applause plantea así un viaje introspectivo de su protagonista comprendiendo sus propias motivaciones y su incapacidad para interpretar un rol para el que nadie puede prepararse de antemano, para el que quizá no tenga el talento o las aptitudes que le desbordan interpretando a personajes atormentados en los que puede proyectar sus demonios interiores y aceptar catárticamente su identidad, expresando con total honestidad su verdadero estado emocional a través de la falsedad del arte.
Crítico y periodista cinematográfico.
Creando el podcast Manderley. Hago cosas en Lost & Found.