El nombre de Ali Ahmadzadeh no nos resultaba demasiado conocido hasta la consecución del Leopardo de Oro en el pasado Festival de Locarno, donde compitió con su nuevo largometraje, Critical Zone, y es que si bien el realizador había pasado por certámenes como Berlín con su Atomic Heart Mother o las Tallinn Black Nights con Kami’s Party, se mantenía hasta ahora en un segundo plano.
El cineasta nos pone tras la figura de Amir, quien lleva una vida solitaria. Con su perro como única compañía, conduce por los bajos fondos de Teherán traficando con drogas y sanando almas atribuladas como si de un moderno profeta se tratara. Transita las calles de la ciudad sin rumbo fijo, siguiendo las indicaciones de su GPS mientras se droga para huir de un pueblo sin futuro. Y, sin embargo, en su deambular encontrará la semilla de la resistencia.
Trailer de Critical Zone
Póster de Critical Zone