Kiyoshi Kurosawa volvía el pasado 2016, y lo hacía en mejor forma que nunca: su Creepy conquistó Sitges con un film de género por encima de la media, y Le secret de la chambre noir dejó también en general gratas impresiones que han hecho olvidar batacazos anteriores y no muy lejanos como Real. Tras ello, el nipón no desiste y se vuelve a aferrar a su mayor aliado —otra vez el thriller en clave horror-fantástico— con una Strolling Invader basada en la novela Sanpo Suru Shinryakusha.
En ella, Narumi Kase no se lleva bien con su marido Shinji Kase. Un día, Shinji desaparece. Pese a que volverá días más tarde, parece otra persona totalmente distinta. Shinji es ahora gentil y tierno. Va a pasear cada día. Mientras, una familia es brutalmente asesinada y un fenómeno sin explicación tiene lugar. Sakurai, un periodista, cubre la historia de la familia asesinada. Entonces, Shinji le confesará a su mujer que él ha venido a la Tierra a invadirla.
Masami Nagasawa —una de las protagonistas de Nuestra hermana pequeña de Koreeda, también presente en uno de los bombazos del cine de género de 2015, I Am a Hero—, Ryûhei Matsuda —al que veremos en The Raid 3, y que ha trabajado con cineastas como Miike, Tsukamoto o Sabu— y Hiroki Hasegawa —uno de los rostros centrales de Shin Godzilla— son sus tres protagonistas.
La cinta, que a buen seguro pasará por algún festival este 2017, llegará a cines nipones el próximo mes de septiembre.
Redacción: Rubén Collazos