Si pensamos en cine húngaro actual, tal vez nos venga a la cabeza Béla Tarr (Armonías de Werckmeister) o Benedek Fliegauf (Womb), pero no todo queda ahí. Nuevos proyectos se acercan, como el de Gyula Nemes, director que se atreve con la ficción una vez más, tras Egyetleneim (My One and Onlies, 2006), que suele moverse en el documental, como en su última aportación Negative History of Hungarian Cinema.
Una cita de Albert Einstein le ha llevado hasta Zero, «si las abejas desapareciesen de la faz de la Tierra, al hombre solo le quedarían cuatro años de vida». Junto a Tamas Beregi ha escrito el guión, que cuenta la historia de un hombre de unos 30 años que, tras haber dirigido una fábrica de miel artificial, decide cambiar su vida y dedicarse a la apicultura forestal. No es fácil llevarlo a cabo cuando un repetidor de telefonía móvil atrae y destruye sus abejas. Este será el inicio de una serie de protestas en defensa del medio ambiente junto a su novia, convirtiéndose cada vez en más radicales y mediáticas. Pero la lucha, en ocasiones, puede convertirse en otro componente más del sistema.
Esta producción en la que participarán distintos países europeos, comenzará su rodaje en diciembre de este año, prolongándose hasta mayo del 2013, con localizaciones en Hungría y Burkina Faso.