Hay espacios que cobran entidad por sí solos, casi personalizando su propio hábitat. Georden West apela a uno de estos espacios, concretamente emplazado en Boston, como esqueleto central de su primer largometraje tras las cámaras, una Playland que nos traslada, a priori, al terreno documental, enterrando sin embargo una ficción entre onírica y fantasmagórica.
Así, el Playland Café, que operó en Boston desde 1937 hasta 1998 como el bar gay más infame y de más larga duración de la ciudad, se erige como protagonista en esta ópera prima que sigue a sus empleados y a otras personas que han frecuentado ese espacio, tejiendo un tapiz de anécdotas personales y comunitarias a lo largo de la existencia del bar, finalmente clausurado y demolido, aunque nunca olvidado, debido a los desenfrenados proyectos de “renovación urbana” existentes en la ciudad. Como lugar de reunión para extraños, también fue blanco de redadas policiales y zonificación.
A continuación os dejamos con el estimulante trailer para esta Playland que competirá por el Tiger en IFFR.
Redacción: Rubén Collazos