Dirigió en 2004 una de las grandes sorpresas para los premios del país vecino, y es que Cuando sube la marea, su ópera prima, (que realizó junto a Gilles Porte —este volvería a ponerse tras las cámaras en 2010 con el documental Dessine-toi…—) recibió hasta dos galardones en los César: el de mejor actriz para la propia Yolande Moreau que protagonizaba, y el de mejor debut en largo. También fueron laureados en los European Film Awards con el European Discovery of the Year.
No obstante, y tras eso, Yolande Moreau había continuado con su carrera de actriz a expensas de un segundo proyecto esperadísimo. La oportunidad ha surgido tras todos estos años y parece que ahora repetirá en la dirección haciéndose cargo de Henri, la historia de un encuentro entre dos personajes solitarios: el que da nombre al título, un tipo de cincuenta años que se refugia en el alcohol, y Rosette, una muchacha con un ligero retraso que sueña con el amor, la sensualidad y… porque no, vivir una vida normal.
La película, que finalmente ha recibido apoyo gubernamental, será producida por Christmas in July (que ya ha estado en títulos como Vous n’avez encore rien vu, lo último de Alain Resnais o Où va la nuit, el nuevo film de Martin Provost —director de Séraphine, casualmente también protagonizada por Moreau—) y Versus a cargo de la parte belga de la producción.