A David Cronenberg le van los proyectos extremos y complejos. Es una pasión que nos seduce constantemente, y si tiene una nueva película entre manos nuestro ritmo cardíaco se dispara. Maps to the Stars es esa película que le ronda desde 2006, la que él mismo tilda de ser «completamente diferente, pero muy mordaz y satírica, difícil de vender». Todo porque se atreve con Hollywood, rodará por primera vez en Estados Unidos y será para una película en la que se habla de agentes, actores y directores, de ese mundo seductor y repulsivo que maneja los hilos del cine estadounidense, una combinación tan potente que en sus manos puede resultar desgarrador.
Para ello ha unido a Robert Pattinson (Cosmopolis) y a Viggo Mortensen (Un método peligroso, Promesas del Este, Una historia de violencia) a la virgen en asuntos “cronenbergianos” Rachel Weisz (en la imagen My Blueberry Nights) como actores para esta nueva película, que comenzará su rodaje en mayo con un presupuesto de 15 millones de dólares.
En vez de asustarnos por su rodaje en Estados Unidos, nos atrevemos a pensar que siempre que la crudeza vaya junto a Cronenberg, algo inolvidable saldrá a la luz.