Tal vez el títulos os transporte a una etapa donde lo épico estaba en auge. Pero no. Jonás Trueba vuelve a sumergirse en el amor tras su impactante Los exiliados románticos (impacto no por su fuerza, la road movie también inspiraba amor, pero el público tuvo sentimientos encontrados ante el resultado) en La reconquista.
Deja las carreteras francesas para volver a Madrid, donde ya trabajó con Los ilusos, con la intención de reencontrar en dos etapas distintas a Francesco Carril (un imprescindible para Trueba), Itsaso Arana (una de las protagonistas de Las altas presiones), los noveles Pablo Hoyos y Candela Recio, y Aura Garrido (magnífica en Stockholm, y que también coincidió con Carril en Los ilusos).
En La Reconquista, Manuela y Olmo se reencuentran en un futuro que se habían prometido quince años antes, cuando eran adolescentes y vivieron su primer amor. A partir de esta premisa romántica, La Reconquista es en realidad una película en busca del tiempo; o sobre la conciencia del tiempo: del tiempo perdido y del tiempo recuperado; sobre lo que recordamos de nosotros mismos y sobre lo que no recordamos; sobre las palabras, los gestos y los sentimientos a los que seguimos guardando fidelidad, porque nos definen y nos interpelan en el presente, el pasado y el futuro.
Con el rodaje ya terminado, la película se estrenará en España el 30 de septiembre.
Vía | Cineuropa