La actriz y directora Deniz Gamze Ergüven ha traído a Sarajevo una historia sobre la Turquía actual, país que mantiene una guerra de identidad donde se mezcla religión, política y cultura. Ayudada en el libreto por Alice Winocour, una trotamundos que lo mismo participa en el guión de una cinta serbia donde se reconoce sin tapujos las masacres de las tropas serbias en suelo bosnio durante la guerra (Ordinary people, Vladimir Perisic, 2009), que dirige dos cintas francesas o se va a la Turquía profunda a mostrarnos sus contradicciones.
Más sencillo no puede ser. Cinco hermanas que viven con su abuela y su tío tras la muerte años atrás de sus padres, se despiden de su profesora favorita que marcha a Estambul, a mil kilómetros. Ese mismo día, con las clases finalizadas por las vacaciones de verano, juegan en el mar con unos chicos. La cámara nos muestra a unas chicas que están disfrutando de su adolescencia, con una luz natural, entre risas y chapoteos. Aún niñas, ya casi con cuerpos de mujer. Será la última vez que disfruten de su infancia. Al llegar a casa la abuela considera que su comportamiento ha sido indecente, por lo que ella y su hijo las recluyen en la casa todo el verano mientras una a una las van casando en matrimonios concertados para solucionar el problema.
La historia está narrada desde el punto de vista de la pequeña, que verá como sus hermanas van “cayendo” una a una. A su vez, sigue siendo la única que en cierta manera no logra entender muy bien que sucede, porque el cambio que las demás, su sexualidad y la sensualidad que desprenden en los demás, parece llegarle por sorpresa. Su confidente es la hermana que la precede inmediatamente, una chica de apenas 13 años. Esta unión será la última en ponerse a prueba y tratar de ser destruida por una abuela que no alberga maldad alguna, incluso las cubre en alguna ocasión. No podemos decir lo mismo de un tío que pasa por ser el cliché de machote de toda la vida. Cliché que desgraciadamente campa a sus aires en la Turquia del presidente Tayyip “bigotito asqueroso” Erdoğan.
Sólo una vez hace acto de presencia ese presidente que intenta llevar a Turquía de regreso a la tradición y a la religión más acérrima y es cuando durante la comida la familia ve las noticias, donde el presidente hace uno de sus discursos más recordados por las jóvenes turcas; aquél donde dijo textualmente que una mujer honrada no ríe.
Cada hermana es un mundo y su casamiento, también. Así mientras la mayor logra casarse con alguien de su agrado, la siguiente se ve abocada a lo que todas luces será un matrimonio infeliz y amargado. Resulta casi divertida esa escena donde debe ir al hospital porque en la noche de bodas no ha sangrado, para “humillación” de todos. El médico constata lo que ella grita todo el tiempo, no es que no fuera virgen, es que su marido no tenía ni idea de lo que tenía que hacer. La mayor fue precavida y hacía lo que se solía hacer en España en los años 50, por detrás y con mantequilla (Al menos Jess Franco en sus memorias apuntaba que las jóvenes españolas estaban abogadas a realizar sexo anal si no querían tener problemas luego a la hora de casarse).
Quizás es porque mañana es 19 de Septiembre y uno no puede olvidar la noche en que asesinaron a Federíco García Lorca. O quizás es porque la coguionista, Alice Winocour, es una trotamundos que bien podría conocer al poeta, pero la cinta podría ser una especie de Bodas de sangre en Turquía. Hay mucho de lo escrito por el poeta en esta película. Sobre todo en su parte central.
La última media hora cambia de registro y nos muestra un thriller con las dos más pequeñas como protagonistas. Sólo quedan ellas, pero no están dispuestas a ir tranquilamente como corderitos al matadero. Precisamente son las más inocentes las que enseñan los dientes.
En definitva la cineasta turca cumple todos sus objetivos con su película. No sólo trata un tema candente (¿cuántas mujeres llevamos asesinadas este año en nuestro país?) y de fácil aplauso en festivales, sino que resulta estimulante, lúcida y sensual en el secuestro de la adolescencia que sufren sus protagonistas.
Será una de las películas que den mucho que hablar este año. Sólo queda cruzar los dedos para que llegue a nuestro país.