Tras el pequeño bache que fue en su carrera Loverboy, su último trabajo, el autor de Cómo celebré el fin del mundo, una de las menudas sorpresas que dio el cine rumano en 2006 se encuentra ahora rodando el que será su tercer largometraje, una Rumeno que producirá el propio cineasta a través de su productora Strada Film, y que además cuenta con la participación de las suecas The Chimney Pot (responsable, entre otras, de la última ganadora en Un Certain Regard, White God) y la gran Film i Väst (que ha estado tras algunos de los últimos éxitos del cine nórdico tales como Call Girl, Come, duerme, muere o La caza), además de la italiana Apapaja (que este mismo año producía el documental Il treno va a Mosca).
Con la participación de actores como Alexandru Potocean (Camino a la libertad) y Ada Condeescu (que ganó el Oso de Plata por su papel en Si quiero silbar, silbo), Rumeno trata sobre un joven que vuelve a vivir con su familia en Bucarest después de pasar un año trabajando en tierras italianas. Su mujer Monica y su hijo pequeño están muy contentos por su vuelta, pero parecen haber cambiado. La pareja intentará pasar junta una noche para conectar de nuevo, pero nada será tan sencillo como parece.
Su rodaje se inició la semana pasada en Bucarest y se prolongará hasta el próximo 16 de agosto para un estreno que debería llegar a Rumania en primavera.
Vía | Cineuropa