Christoph Waltz, que ha pasado en los últimos años prácticamente del anonimato a ser uno de los actores más venerados del panorama, ya sea por sus roles en los films donde ha colaborado con Tarantino o por su papel en Un Dios salvaje, el penúltimo trabajo de Roman Polanski, está culminando el rodaje de Zero Theorem junto a Terry Gilliam (donde ha coincidido con actores como Matt Damon o Tilda Swinton) a la par que se prepara ya para su próximo trabajo, la Reykjavik de Mike Newell donde dará vida a uno de esos personajes emblemáticos que ya forman parte de la historia del panorama político, Mijaíl Gorbachov.
Rodada en los Babelsberg Studios en Alemania, Christoph Waltz habría aceptado el papel del detective Jacek Wroblewski en otro proyecto, en esta ocasión una iniciativa estadounidense que lleva tiempo interesando a Polanski, True Crimes.
De momento, lo que parece cierto es que Waltz encarnará al protagonista del film situado en el mundo de la mafia polaca e inspirado en la historia real del escritor Krystian Bala, instigador de un caso de asesinato sin solución cuyos detalles revelaría a posteriori en su novela. Así, veremos si el cineasta polaco, que lleva desde 2010 tras este proyecto, volverá a colaborar con Waltz en una cinta que, sin duda, podría ser otro de los grandes trabajos de Polanski a juzgar por lo que de momento sabemos de ella.
Vía | Cineuropa