Autor hasta la fecha de dos largometrajes (Emulsion y The Tender Hook), Jonathan Ogilvie parece ser uno de esos cineastas cuya mirada no parece ajustarse a las convenciones. Algo que ya dejan entrever sus anteriores trabajos, pero especialmente este cyber-thriller que se apoya en una suerte de ‹found footage› para construir su propio ejercicio: entre las intrigas políticas y un drama cargado de emociones.
En su reparto encontramos a Tilda Cobham-Hervey (protagonista de la recién estrenada I Am a Woman que lució internacionalmente gracias a su debut, también como rostro central, en 52 martes), el gran Hugo Weaving (al que en los últimos años hemos visto en Black ’47 o Hearts and Bones), Josh McConville (protagonista de la reivindicable sci-fi The Infinite Man), Chris Bunton (de la reciente y aún por estrenar Relic).
En el film, adaptando un clásico de Joseph Conrad a una Australia del futuro cercano donde el gobierno puede espiar todos los aspectos de la vida diaria, la idealista Winnie y su novie Conrad quieren interrumpir el G20, pero no son conscientes de que probablemente estén siendo llevados a una trampa. En ese contexto, el Ministro de Justicia se encontrará ante un flujo interminable de secuencias de video —desde cámaras ocultas, escuchas telefónicas, sesiones de Skype y vigilancia de seguridad— bajo la presencia de un ex-policía muy insistente. La pregunta: ¿por qué el ministro necesita ver esas imágenes?
Las respuestas, quizá, en el primer trailer de Lone Wolf.
Trailer de Lone Wolf
Póster de Lone Wolf (clic para ver completo)
Redacción: Rubén Collazos